Por: Aura Gutiérrez
Depresión Posparto – Prevención y detección
Sin duda alguna, la llegada de un nuevo integrante al hogar, es una de las cosas más bonitas y llenas de aprendizaje en la vida de las parejas y las familias, sin embargo, después de que el bebé está en casa, las cosas cambian por completo y la situación en ocasiones puede afectar emocionalmente el ambiente y la relación de los miembros que no saben cómo actuar o el porque esto ocurre después de un acontecimiento tan lindo como la llegada de un hijo.
Lo más importante de todo, es comprender que este proceso, es un problema de salud pública. Si tú estás viviendo algo similar, debes saber que alrededor del mundo muchas personas pasan por esta situación que en muchas ocasiones puede iniciar durante la gestación o durante las cuatro semanas después del nacimiento del bebé.
Cada mujer es diferente y durante el embarazo el cuerpo se modifica física y hormonalmente, por lo que muchos pensamientos acerca del aspecto físico, la relación de pareja, la actividad laboral, las expectativas sobre ser madre (personales y familiares), la dinámica que se modificará a partir del acontecimiento, son algunos de los hechos que pueden impactar en la salud mental.
Los siguientes puntos, son algunos mensajes importantes de ver en las mujeres que acaban de ser mamás, después de las tres semanas del parto:
- Irritabilidad.
- Melancolía
- Cambios en la alimentación.
- Patrones anormales de sueño.
- Desapego al bebé e incluso enojo.
- Sentimientos de culpa.
- Ansiedad.
- Falta de motivación.
- En casos severos pueden presentarse pensamientos o ideas autolesivas, ideación suicida, intención de dañar al recién nacido.
Comprender la salud mental es no juzgar. Un acto necesario para poder acompañar a todo aquel que esté presentando la anterior sintomatología y recordar que en muchas ocasiones, la prevención se lleva a cabo mediante la atención psicológica durante el embarazo o ante los primeros síntomas de alerta. De ser necesario, se puede trabajar de manera integral con el apoyo de psiquiatría con una debida medicación para controlar los impulsos que puedan poner en riesgo la vida de la madre o del bebé.
Si estás leyendo esto y te sientes identificada con los puntos, no te culpes. Recuerda que antes de ser mamá, eres una mujer, tienes que soltar expectativas en muchas ocasiones propias y lo estás haciendo genial. Busca ayuda, el primer paso es sentirte bien contigo. Llevar atención psicológica no es para aquellos que estén pasando por un mal momento o tengan una enfermedad en específica. Las emociones son parte del ser humano, por lo que trabajar y cuidar de la salud mental es vital para tener calidad de vida.
¿Sabías que la depresión posparto también puede sufrirla la pareja?
Así es, la llegada de un nuevo integrante a la familia puede ser tomada en ocasiones con mucha ansiedad por el padre. Al tener la presión muchas veces social de ser el principal sostén del hogar, tiende a preocuparse por situaciones económicas, la relación de pareja, los cambios que se llevarán a partir del nacimiento, así como el desgaste físico que implica el proceso de adaptación a la rutina de horarios del recién nacido pero, en su postura, le implica mayor dificultad expresar sus emociones.
La comunicación en pareja, con los hijos, es la base de la salud emocional. Perder el miedo a hablar ayudará a estabilizar muchas problemáticas.
