Por: Iván Guzmán | Notaria 191
somos seres sociales por naturaleza y por ende convivimos en una sociedad, en un gran país llamado México; rico en infinidad de cuestiones, pero sobre todo rico por su gente valiosa, ingeniosa, trabajadora y que no se raja a la primera de cambios. Sin embargo ante una sociedad en constante crecimiento y cambio, afrontamos a diario nuevos retos, desde la convivencia con nuestros familiares y vecinos, compañeros de trabajo, hasta con cualquier persona que nos topemos en el tráfico del diario vivir y que simplemente no conocemos, sí, desconocidos con necesidades iguales o mayores a las de nosotros,
y con quienes muchas veces tenemos conflictos que bien podrían evitarse, por no ceder el paso a un vehículo o a un peatón, por no respetar lugares asignados para personas con capacidades diferentes, por querer ganarle el lugar de estacionamiento a otro y por muchas cosas mas que no vale la pena discutir y que al actuar prudentes y cordiales podemos evitar.
Vivir en sociedad no es cosa sencilla, pero si entre todos aportamos, podemos lograr una convivencia mas sana y respetuosa, con gobiernos que representen a la mayoría, sin demagogias que vulneren, lastimen y dividan. El verdadero poder de un gobierno estriba en su gente, en el pueblo que elige libremente a gobernantes que los representen por tiempo determinado
Causas ecuménicas como las movilizaciones ciudadanas, las manifestaciones pacíficas, las opiniones divergentes son eje fundamental de la libertad de expresión y de la libertad en todos los sentidos; en una democracia se vale disentir, se vale no estar de acuerdo, pero se tienen que encontrar puntos en común. Tan solo por el derecho humano a la libertad, a defender un ideal, como antes lo fue a través de sangrientos enfrentamientos, hoy lo es de manera pacífica y solidaria, con el único objetivo de logra cambios para bien, para una mejor sociedad y para un mejor mundo.
Causas ecuménicas como las movilizaciones ciudadanas, las manifestaciones pacíficas, las opiniones divergentes son eje fundamental de la libertad de expresión y de la libertad en todos los sentidos; en una democracia se vale disentir, se vale no estar de acuerdo, pero se tienen que encontrar puntos en común. Tan solo por el derecho humano a la libertad, a defender un ideal, como antes lo fue a través de sangrientos enfrentamientos, hoy lo es de manera pacífica y solidaria, con el único objetivo de logra cambios para bien, para una mejor sociedad y para un mejor mundo.
VIVAMOS SIEMPRE BAJO LAS PREMISAS DEL RESPETO Y LA
TOLERANCIA, SIEMPRE EN BUSCA DE LA PAZ Y DE LA LIBERTADEvita conflictos, vive tranquilo y #SeamosLibres, por una cultura de la PAZ